(o, de forma incorrecta, pero frecuente, asprin). Como todo el mundo sabe, Aspirin y Aspirina (con mayúscula inicial, por tratarse de nombres propios) son sendas marcas comerciales propiedad de los laboratorios Bayer. En los Estados Unidos y el Reino Unido, aspirin es también una denominación oficial común, incluida en las farmacopeas estadounidense y británica. No sucede igual en España, donde debe traducirse siempre por ácido acetilsalicílico, que es la denominación oficial recogida en la Farmacopea Europea.

Esta diferencia esencial entre el inglés y el español se remonta a 1917, cuando, con motivo de la I Guerra Mundial, el gobierno estadounidense confiscó los activos de Bayer en los Estados Unidos. En 1919 se ofreció en subasta pública la marca Bayer (y, con ella, también la marca Aspirin), que fue adquirida por Sterling. De este modo, Bayer perdió la patente y el derecho a hacer uso de sus propias marcas en los Estados Unidos. En 1994, Bayer recobró los derechos a usar la cruz de Bayer y la marca Aspirin en los Estados Unidos, pero no de forma exclusiva, como sucede en los países de habla hispana.

Bayer perdió también los derechos de la marca Aspirin en el Reino Unido, y de la marca Aspirine en Francia; pero los conserva en Canadá.

Pese a lo dicho, ‘aspirina’ figura también en el diccionario de la RAE como sustantivo común desde 1936.

Fernando A. Navarro

Entrada extractada por el autor a partir de su Diccionario de dudas y dificultades de traducción del inglés médico (3.ª edición); versión electrónica 3.07. Madrid: Cosnautas, 2016. Consultable en línea: www.cosnautas.com/librorojo.html