Se encuentra inmerso estos días en la presentación del Proyecto Genográfico, un estudio patrocinado por National Geographic e IBM que busca conocer los caminos migratorios del ser humano a lo largo de la historia. Esta investigación, a caballo entre la antropología y la genética, es de grandes magnitudes. Durante cinco años, diez laboratorios de todo el mundo trabajarán en conjunto y con la misma metodología para analizar más de 100.000 muestras de DNA procedentes de distintas comunidades indígenas. Tal cantidad de información permitirá conocer cómo la humanidad pobló el planeta, desde el momento en que el hombre salió de África hace más de 60.000 años.

Lluís Quintana-Murci es uno de los participantes en este megaproyecto. Nacido en Palma de Mallorca, actualmente trabaja en el Institut Pasteur de París. Su especialidad es la genética de las poblaciones humanas, una disciplina que estudia la evolución y los cambios que ha sufrido el DNA de la especie humana desde sus orígenes. Pasado, presente y futuro de nuestra especie es el sugerente título que vino a presentar este investigador mallorquín el pasado 18 de octubre al ciclo de conferencias La Ciencia en Europa, organizado conjuntamente por Aula El País y la Fundación Dr. Antonio Esteve.

Uno de los grandes hallazgos que ha podido probar la genética de poblaciones es la inexistencia de diferentes razas en nuestra especie, demostrando científicamente la inutilidad del racismo. Si echáramos la vista atrás hacia nuestros ancestros nos llevaríamos más de una sorpresa, ya que nuestro genoma es el resultado de múltiples transformaciones. De esta manera, todos compartimos muchas similitudes, pero también grandes diferenciaciones.

Pero la genética de poblaciones, tal como vaticinaba Lluís Quintana-Murci en el título de su presentación, no sólo sirve para conocer la verdadera historia de nuestra especie. Esta disciplina también permite entender las bases de muchas enfermedades genéticas como la arterioesclerosis o la diabetes y caracterizar diferencias a nivel poblacional ante este tipo de afecciones. ¿Por qué la población afroamericana es tan propensa a la obesidad y tiene tantos problemas cardiovasculares? ¿Qué relación existe entre el cromosoma Y y el cáncer de testículos? Son algunas de las cuestiones a las que puede dar respuesta el estudio de la evolución de los genes humanos.