Actualmente, sólo el 12,8 % de catedráticos de las universidades españolas son mujeres, a pesar de que representan el 59 % del total de licenciados universitarios; instituciones como la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación o la Fundació Catalana per a la Recerca no cuentan con ninguna mujer entre sus filas; en España, no hay ni una sola catedrática de Pediatría o Ginecología y Obstetricia. Estos son sólo tres ejemplos que evidencian la clara discriminación hacia las mujeres en el ámbito científico y académico. Y son sólo algunos de los múltiples datos que presenta el documento Mujeres y Ciencia, elaborado por el Observatorio de Bioética y Derecho de la Universitat de Barcelona.

Con el objetivo de denunciar esta preocupante situación y de proponer un decálogo de medidas para frenarla, cinco mujeres pertenecientes a este observatorio universitario presentaron el 18 de noviembre de 2004 en la Casa de Convalecencia del Hospital de Sant Pau de Barcelona un estudio que constata la desigualdad entre hombres y mujeres a la hora de acceder a cargos de responsabilidad. La experiencia de una sexta mujer, Neus Visa, profesora del Departamento de Biología Molecular y Genómica Funcional de la Universidad de Estocolmo, sirvió para exponer un modelo a seguir, el de Suecia, en políticas de igualdad de oportunidades.

La presentación, organizada también con la colaboración de la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas y la Fundación Dr. Antonio Esteve, contó con las siguientes ponentes: Roser González (catedrática de Genética de la UB y coordinadora de este estudio), María Casado (directora del Observatorio de Bioética y Derecho), Teresa Freixes (catedrática de Derecho Constitucional de la Universitat Autònoma de Barcelona), Carmina Virgili (catedrática de Geología de la Universidad Complutense de Madrid) y Rosa Virós (catedrática de Ciencia Política y de la Administración y rectora de la Universitat Pompeu Fabra).