Un estudio muestra que la diversidad genética favorece un incremento de la estatura y las capacidades cognitivas, pero no protege frente a enfermedades cardiovasculares

DANIEL MEDIAVILLA / NOTICIA MATERIA

La evolución ha seleccionado a los humanos para ser más altos y listos que sus ancestros, pero no necesariamente más sanos. Estas son algunas de las conclusiones de un estudio que se acaba de publicar en la revista Nature. Los autores, liderados desde la Universidad de Edimburgo (Reino Unido), analizaron la información sobre genética y salud de más de 100 estudios llevados a cabo en todo el mundo. En total, se recogían datos sobre más de 350.000 personas.

Los resultados indican que la diversidad genética, que se incrementaba cuanto más lejano sea el parentesco entre los padres, está relacionada con una mayor estatura, mayor capacidad cognitiva y mayor nivel educativo. Los autores estiman que los hijos de primos carnales miden 1,2 centímetros menos que la media y tienen 10 meses menos de educación.

Sin embargo, el análisis, que también observó cierta ventaja de la diversidad genética en el funcionamiento de los pulmones, no encontró, a diferencia de otros estudios anteriores de menor tamaño, el mismo vínculo con otros rasgos como niveles de colesterol o presión sanguínea que tienen una gran influencia en enfermedades graves como las cardiovasculares o la diabetes.

Estos resultados contradicen otros previos que sugerían que un parentesco cercano de los padres aumentaba las probabilidades de una persona de sufrir determinadas enfermedades. Algunos trabajos habían calculado que las probabilidades de que los hijos de primos carnales tengan defectos congénitos era solo un 1,7% mayor que el de parejas sin parentesco cercano. Además, la tasa de mortalidad es un 4,4% más elevada.

El estudio que hoy se publica en Nature, observó efectos similares en poblaciones de cuatro continentes, algo que sugiere que la estatura y la inteligencia han experimentado una presión selectiva a lo largo de la evolución humana mientras otros factores de riesgo relacionados con algunas enfermedades, no.